Sunday, June 19, 2011

A M O R

Jesus no espera que seamos unos sievos, antes espera que lo amemos y el servicio sera un fruto. De nada sirven "experiencias en el espiritu" o el "servicio en la Iglesia", si el no tiene nuestro corazon. A veces tenemos deseos de servirle y a veces hasta frustraciones falsas (ya que no todos somos llamados al ministerio y eso es algo fuerte a entender en medio de la juventud cristiana), pero si Dios tiene que prescindir de nuestro servicio para poder tener nuestro corazon, sin duda lo hara.